CAPITULO I

La Fraternidad Hijos del Cristo Jesús ( F.H.D.C.J.) es una asociación cuyo objetivo primordial es propender por la cristificasión de sus miembros, es decir hacerse verdaderos hijos de Dios, mediante su perfeccionamiento espiritual a través del trabajo por el bien de nuestros semejantes y la búsqueda de la verdad.

La F. H D. C. J. es una Orden Operativa y Filosófica. Operativa en cuanto es Activa y Práctica, tiene como principio el Amor y por esta razón se dedica al ejercicio de la enseñanza y de la armonización espiritual y corporal del Hombre. Es filosófica porque se encamina hacia la búsqueda de la verdad mediante el estudio y razonamiento con el ejercicio de la receptividad de los preceptos del Cristo.

Es una Orden Espiritual que cumple su misión para beneficio de todos los seres humanos sin distinción de nacionalidad, creencia religiosa, política, raza o posición social. Por consiguiente, es universal y tiende sus brazos a toda la humanidad.

Para adelantar esa obra, la Fraternidad admite en su seno a todos los seres humanos que se sientan atraídos por este ideal y estén dispuestos a servirle con rectitud de propósitos, claridad, serenidad de juicio y pureza de ideales. No desea en su seno a fanáticos, ni sectarios de ninguna clase, sino espíritus libres y comprensivos que no olviden nunca la tolerancia y el amor fraternal que se deben todos los hombres.

La fraternidad es el sello o precepto principal que cobija otros sellos o principios que regían inicialmente el modo de vivir del pueblo Atlante, que era encabezada, por un grupo de maestros terrenales, que dirigían a muchos grupos que organizaban y realizaban diferentes actividades para guiar a los habitantes de la Atlántida en el camino por perfeccionar su espiritualidad.

Esta fraternidad era esencialmente espiritual y desde hace miles de años se implantó en esta nación, dirigiendo las actividades, guiando los grupos de paisanos y de extranjeros, que venían a adquirir más conocimiento en el campo espiritual. Aprendieron que muchos factores que forman parte del mundo espiritual como la mente, el amor y la verdad, son factores que los seres humanos deben desarrollar.

Estos sellos explican cómo estos valores se pueden fusionar en el espíritu de una persona, para que pueda seguir su evolución en el mundo espiritual. Hay otros sellos más profundos como la conciencia y el cosmos, son sellos para un mayor análisis.

Son sellos creadores, son sellos de la vida, de la energía y de la verdad. De todas formas, todos los sellos se interrelacionan activamente, porque el uno explica al otro, el uno complementa al otro.

Estos sellos son dirigidos para personas que busquen la fraternidad y en verdad deseen enriquecer su vida espiritual. La fraternidad es así porque la conforman seres encarnados y desencarnados, por eso es amplia y libre. La fraternidad es libertad, ella es la guía.

La Atlántida se destacó por esa armonía espiritual, cada uno de los seres que la habitaron fueron privilegiados en su estado mental. Les permitía tener la tranquilidad y la paz interior para comunicarse con sus semejantes. Eso hacía que tuvieran una conciencia libre, dirigida siempre hacia el bien….Leer más.

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